Paseando en London Bride (Ethan)

Hacía una mañana espléndida aquel día, por lo cual decidí que no me quedaría en casa como solía hacer. así que cogiendo mi parasol salí de la mansión y me dirigí a la ciudad. Caminé durante gran rato hasta que llegué a London Bride, allí el aire era más ligero y fresco lo cual me hacía sentir bien.

Estab surmergida en mis propios pensamientos cuando una voz sonó tras de mi y alzando levemente los hombros por la sorpresa me di la vuelta levemente asustada.
-¿P-princesa?-dije con un leve rubor en mi rostro, aquel tipo de cosas siempre solían provocarlo y más cuando me asustaba.-Oh, lo siento, me ha asustado...-dije suspirando mientras me llevaba una mano al pecho aliviada.

Me sorprendi aún más cuando tomó mi mano y la besó, el rubor no desapareció.
-Ah, no, nada de eso, es solo que estaba distraída y...me ha sorprendido, solo eso, no se disculpe, no es necesario.-le dije, no tenía importancia en absoluto.-Hacía tiempo que no le veía Sr. Gray.-dije tratándole con formalidad, hacía tiempo que nos conocíamos pero por alguna extraña razón me sentía obligada a tratar a todo el mundo así, casi nunca pronunciando nomres de pila o tuteando, quizás se debiese a mi calmado caracter. Ethan Gray, tan elegante y caballeroso como siempre.

Bajé la cabeza, recordaba que no le gustaba su apellido pero no podía evitarlo, para tener 19 años era ligeramente torpe para demasiadas cosas.
-Lo siento, Ethan...-dije sintiéndome extraña mientras pronunciaba su nombre.-He estado lo bien que se puede estar siendo yo.-bromeé y luego más seria hablé de nuevo.-Ha sido una temporada extraña, apenas veo a mi hermano mayor y tampoco veo demasiado a mi hermano mellizo, lo que a veces me hace pensar que no estan en casa...aún así siempre nos vemos cuando podemos.-dije entonces.-.-¿Y usted?, quiero decir, ¿y tú?-rectifiqué.

Caminé junto a él, aún sosteniendo mi parasol.
-Eso no son buenas noticias precisamente.-le dije.-Sin embargo espero que se arregle pronto, son tu familia pese a todo, no deberías dejarlo así.-le dije con suavidad.

Asentí con la cabeza.
-Sí, lo siento, no era asunto mío.-dije, siemore metía la pata, ya era algo habitual en mi.-¿Sabes?, pensaba que te habías marchado de Londres, me extrañaba demasiado no verte por las calles o en algún café.-le dije, como siempre con la mirada clavada en el suelo.

Le sonreí.
-Aún así me alegro mucho de volver a verle.-le dije fiajndo mis ojos en los suyos.

Se paró de golpe y agarró mi mano lo cual no dejó de sorprenderme, entonces me llevó hasta el muro y se paró, para después contestarme y acariciar mi cara, mis ojos esmeralzados se abrieron como platos ante la sorpresa y de nuevo me sonroje...era algo realmente infantil, que a aquellas alturas de mi vida, con 19 años el rubor aún surgiese cuando un muchacho tomaba mi mano o acaricaba mi cara y más cuando se trataba de un amigo. Sabía de sobra sobre la fama de mujeriego de mi acompañante, pero siempre se había portado de una forma muy caballerosa conmigo.
-M-me alegra mucho oír eso.-le dije sonriendo.

Me sorprendí aún más ante su pregunta.
-¿I-intentar algo?-le pregunté desviando mi mirada.

Se acercó aún más y me sorprendí mientras mis mejillas se encendían con intensidad, ya enrojeciendo al máximo debido a la proximidad entre ambos. Iba aretroceder un paso intimidada debido a que nunca nadie había estado tan cercano a mi y menos en plena calle donde los rumores abundaban y más en aquellos tiempos, sin embargo el muro estaba tras de mi y no me permitía mivimiento ninguno y pronto sus labios sellaron los míos. Mis ojos se abrieron más que nunca completamente cohibida, aquel contacto me hizo extremecerme por completo, debido al nerviosismo que sentía en aquel momento, las tiernas me temblaban y dejé caer al suelo mi parasol. Me sentía pequeña, no tan solo ya por la gran diferencia de altura,debido que comparado con él era realmente baja... sino por miedo a no saber como reaccionar. Sentía sus suaves labios sobre los míos, nunca me hubiese esperado tal acción de aquel hombre ya que siempre había estado acompañado de las muchachas más hermosas...cerré mis ojos un instante y después los volví a abrir.

Me quedé quieta durante unos instantes cuando el separó sus labios de los míos con lentitud, suspirando y tomando mi parasol cuando este me lo devolvió, aún realmente roja. Rocé con uno de mis dedos mis labios y luego le miré cuando habló. Agité las manos enseguida para negar.
-N-no, no es nada de eso...solo me he sorprendido, no tiene por que disculparse...-dije de forma nerviosa aún ruborizada, aún recordando aquel repentino beso que nunca me habria esperado, siemore había pensado que Ethan me veía de como a las demás chicas con las que salía, sino como a una amiga simplemente...no quería ser un juego más, lo que me hacía dudar...y me preguntaba por qué me había besado. Llevé mis manos a mi pecho, acariciando una con la otra nerviosa, mientras sentía los acelerados latidos de mi corazón.

Ladeé la cabeza un poco confusa.
-¿T-tan pronto?, apenas acaba de llegar...-le dije mientras con una mano tomaba con suavidad la manga de su chaqueta, luego le solté..